Mantecadas de Riaño

DULCE TRADICIONAL DE LA MONTAÑA DE RIAÑO (LEÓN)

Ingredientes:

1 Medida = 1 Tazón
4 Huevos
1 medida de azúcar
2 medidas de harina
1 medida de nata
1 cucharadita rasa de bicarbonato

Preparación:

Batimos los huevos y luego añadimos el azúcar poco a poco y lo batimos bien. Ahora toca el turno de la nata, la añadimos y batimos, y finalmente echamos la harina y el bicarbonato y lo batimos teniendo cuidado de que no nos salgan grumos.

Listas para hornear.

Una vez reposada la masa se van llenando los envases de papel. Llenarlo hasta la mitad o un poco más de la mitad del envase, pero tener en cuenta que al cocerlo sube la masa y si está muy lleno se acabará desbordando. Una vez rellenados los envases, se echa un poco de azúcar por encima en cada mantecada.

Se pone el horno a 200 grados y las metemos a la altura media del horno, es importante que reciban un primer golpe de calor, y ademas no abrir el horno por lo menos los 10 primeros minutos, las matecadas estarán listas en 15-20 minutos que es cuando estén doradas, dejamos enfriar y listas.

Se puede hacer lo mismo en forma de bizcocho, para lo cual tenemos que usar un molde de plum cake.

Y aquí os muestro el resultado, podéis maridarlas con una copita de Mistela, espero que os gusten.

Mantecadas de Riaño recién horneadas

Origen de la Receta:

Esta receta es exactamente como me la enseñó mi madre Juliana Álvarez natural de Riaño (León), aun recuerdo de niña en el pueblo, cuando iba mi madre por la mañana a amasar a la hornera para preparar los dulces para las fiestas de Ntra. Sra. de Quintanilla, que junto con Rosa Díez se tiraban todo el día junto al horno preparando panes, bollos, mazapanes y mantecadas para tres casas.

Viejo Riaño

Cuando acabada la jornada, recuerdo sus caras cansadas y rojizas, y sus cabezas cubiertas con un pañuelo, para protegerse del calor del horno. Era un espectáculo verlas salir con cestos llenos hasta arriba de todo tipo de dulces. Esta receta es mi particular homenaje a ellas dos, por las horas que pasaban trabajando para hacernos las fiestas un poco más dulces.